¡Comencemos por vaciar completamente el refrigerador y el congelador, quizás antes de ir de compras!
Pasamos las superficies internas con agua y vinagre (o bicarbonato de sodio) o alternativamente podemos utilizar detergentes siempre que no sean abrasivos, mejor si no generan espuma, para facilitar el aclarado.
Para una limpieza a fondo, desmontamos los estantes y accesorios si es posible para llegar a todos los intersticios.
Para recoger el agua que gotea durante el lavado, coloque una toalla en el fondo del refrigerador.
Preste especial atención a los sellos: lávelos con cuidado.
Para el congelador, descongelemos con una espátula de plástico, nunca use cuchillas o utensilios de acero.
El detergente quedará igual que en la nevera, lo importante es secar muy bien el interior.
Alquileres vacacionales
En las casas de vacaciones, que permanecen cerradas un tiempo, recuerde siempre dejar abiertas las puertas del frigorífico, después de haberlo apagado y limpiado, para evitar la formación de moho y malos olores.
¿Cómo organizar el frigorífico? Simplemente coloque la comida correctamente en los distintos compartimentos. Por eso es bueno poner la leche y la nata en los estantes altos, los quesos frescos en el estante mediano y las verduras deben limpiarse, secarse bien y colocarse en el cajón del fondo. Trucos sencillos, que ahorrarán dinero y conservarán los platos por más tiempo.